A través de la investigación y el trabajo comunitario, CEGA ha estado apoyando el uso de recursos geotérmicos de baja temperatura en Chile para calefacción y aire acondicionado.
A través del trabajo que está realizando el Centro de Excelencia en Energía Geotérmica de los Andes (CEGA) de la Universidad de Chile, el uso de recursos geotérmicos de baja temperatura para calefacción y aire acondicionado se perfila como una alternativa viable en Chile.
CEGA ha estado trabajando con diferentes comunidades y gobiernos regionales para aprovechar el potencial de los recursos geotérmicos de baja temperatura. Pablo Valdenegro, uno de los investigadores del CEGA, explica que estos sistemas funcionan mediante bombas de calor conectadas al suelo a través de mangueras.
“Lo que hacen es aprovechar una base térmica que les proporciona el suelo y, mediante otro proceso, que es un proceso de enfriamiento, consiguen una cantidad de calor mucho mayor que la que tiene disponible el suelo”, explica Valdenegro. Este sistema es capaz de proporcionar tanto calefacción como refrigeración a un coste energético mucho menor que la calefacción o el aire acondicionado convencionales.
Valdenegro explica además la ventaja de eficiencia de un sistema de calefacción geotérmica: “Si quiero calentar un espacio con un calentador eléctrico, ese calentador toma un vatio de la red eléctrica y lo transforma en un vatio de calor. Este equipo geotérmico toma un vatio de la red para trabajar y lo transforma en cuatro unidades de calor”.
Un obstáculo importante en la adopción de esta tecnología son los altos costos asociados con su implementación. Para abordar esto, CEGA ha estado realizando diálogos con gobiernos regionales y comunidades para financiar proyectos de climatización geotérmica.
“Con base en la experiencia que hemos tenido, podemos decir que se ha desarrollado una mirada mucho más abierta, de manera proyectiva, en torno a la energía geotérmica. Pero, como toda tecnología, son unos años, donde se ponen a prueba las capacidades tecnológicas, los resultados y, por lo tanto, las iniciativas siempre son difíciles de insertar”, dijo Patricio Alarcón, investigador del CEGA a cargo de este trabajo.
Los territorios del norte han sido particularmente receptivos a esta iniciativa. “La última vez que estuvimos en campo estuvimos platicando con la gente del Municipio de Sierra Gorda, y nos dijeron que el aire acondicionado para ellos no tenía una vida útil de más de dos años, aun teniendo todo el mantenimiento que un sistema como este necesita. La duración de uno cuando es operado con energía geotérmica es de diez años”, relató Bárbara Bravo, coordinadora de proyectos del norte del CEGA.
A finales de 2022, CEGA publicado la “Guía práctica para el uso de energía geotérmica somera para climatización”. Este documento fue la culminación de varios años de experiencia de CEGA en este tipo de sistemas y una serie de proyectos piloto. Se puede acceder al documento completo (en español) aquí.
Fuente: universidad de chile
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