LA PAZ, Bolivia (AP) — Un legislador español dijo el miércoles que fue expulsado formalmente de Bolivia cuando se preparaba para salir del país sudamericano después de haber viajado allí para exigir la liberación del líder opositor Luis Fernando Camacho.
Víctor González, un diputado de derecha del partido español Vox, publicó en Twitter el documento que supuestamente recibió de las autoridades bolivianas momentos antes de partir.
“Cuando ya estaba dentro del avión, dos agentes muy amablemente me informaron que había sido expulsado de Bolivia”, escribió González en Twitter. “Cuba, Nicaragua y ahora Bolivia son los países que me niegan la entrada”.
González y un legislador chileno conservador, Luis Fernando Sánchez del Partido Republicano de Chile, llegaron a Bolivia el fin de semana y estuvieron primero en Santa Cruz y luego en la capital de La Paz.
No se pudo determinar el paradero de Sánchez el miércoles.
El Comité Cívico de Santa Cruz invitó a González y Sánchez a Bolivia para conocer de primera mano la situación tras la detención de Camacho.
Un juez ordenó el viernes cuatro meses de prisión preventiva para Camacho después de que los fiscales alegaran que el gobernador orquestó en 2019 lo que describieron como un golpe de Estado mientras dirigía protestas masivas tras las elecciones que, según la Organización de los Estados Americanos, se vieron empañadas por fraude. Los disturbios resultaron en 37 muertes.
La oposición, que caracteriza la detención de Camacho como un “secuestro”, ha cuestionado durante mucho tiempo la caracterización del gobierno de los disturbios de 2019 como un golpe de estado. Argumenta que los hechos fueron protestas políticas legítimas que llevaron a la renuncia del entonces presidente Evo Morales.
La detención de Camacho ha provocado protestas y enfrentamientos con las fuerzas del orden. Los líderes de Santa Cruz, el próspero centro de agronegocios del país que es ampliamente considerado como el motor económico de Bolivia, han pedido un bloqueo para evitar que los productos lleguen al resto del país.
Gónzalez y Sánchez intentaron visitar a Camacho en la cárcel de Chonchocoro, en las afueras de La Paz, pero se les negó la entrada.
Los dos diputados extranjeros ingresaron a Bolivia como turistas pero luego aseguraron que formaban parte de una misión especial, aunque “no tenían autorización de sus congresos”, dijo el miércoles Freddy Mamani, vicecanciller de Bolivia.
“Ayer formalizamos un comunicado por la vía diplomática para elevar formalmente esta denuncia”, dijo Mamani, y agregó que los legisladores “asumieron un papel político de injerencia en los asuntos internos”.
Los legisladores no fueron los únicos a los que se les negó la entrada para ver a Camacho.
Fátima Sánchez, la esposa de Camacho, viajó a la prisión de máxima seguridad con un comité de líderes de Santa Cruz, pero inicialmente también se le negó la entrada, y las autoridades afirmaron que el líder de la oposición estaba aislado.
“He venido a visitarlo, a ver en qué condiciones está, a revisar su estado de salud”, dijo Sánchez a los periodistas en el aeropuerto.
Más tarde ese día, el jefe del sistema penitenciario de Bolivia, Juan Carlos Limpias, dijo que a Sánchez se le permitió ingresar a la prisión y que podría pasar la noche.
La familia y los aliados de Camacho han expresado su preocupación por la salud del gobernador debido a condiciones crónicas preexistentes, pero el gobierno insiste en que está recibiendo el tratamiento necesario.
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