Toda persona necesita que le revisen la audición periódicamente. Incluso los adultos jóvenes se benefician al someterse a esta prueba. Cuando se detecta a tiempo, la mayoría de los tipos de pérdida auditiva son tratables. Por eso es tan importante programar una prueba de audición. ¿Cuáles son algunas de las razones clave por las que es aconsejable hacerse pruebas de audición periódicamente?

Detectar la pérdida de audición a tiempo

Cuanto antes se detecte la pérdida auditiva, mejor. Con el tiempo, la pérdida auditiva no tratada puede empeorar. Si se detecta a tiempo, existen muchas opciones de tratamiento excelentes disponibles. Cuando programa una prueba de audición, aumenta las posibilidades de identificar cualquier problema en sus etapas iniciales. La intervención temprana para la pérdida auditiva puede minimizar sus impactos y evitar que afecte significativamente su comunicación, relaciones, desempeño laboral y más.

Establecer una línea de base

Realizarse una prueba de audición inicial le brinda un punto de comparación para exámenes futuros. Cuando tiene estos datos de referencia, a los audiólogos les resulta mucho más fácil reconocer los cambios en su capacidad auditiva a lo largo del tiempo. Cualquier cambio significativo con respecto a su norma podría indicar que es hora de abordar la pérdida auditiva. Las pruebas de audición periódicas cada dos años proporcionan puntos de referencia útiles con los que se puede medir la salud auditiva.

Acceda al tratamiento antes

Una vez que se detecta la pérdida de audición mediante pruebas, el tratamiento puede comenzar de inmediato. Los tratamientos más comunes para la discapacidad auditiva son los audífonos y los implantes cocleares. Los audífonos amplifican los sonidos para hacerlos más fuertes y claros. Un implante coclear envía señales eléctricas al nervio auditivo. Al hacerlo, pasa por alto las partes dañadas de la oreja. Este proceso permite una mejor audición. Cuanto antes se implementen estos tratamientos después del diagnóstico, más efectivos tienden a ser. Posponer las pruebas retrasa el acceso a soluciones que pueden mejorar la audición y la calidad de vida.

Monitorear la pérdida auditiva relacionada con la edad

A medida que envejecemos, la pérdida de audición se vuelve cada vez más común. Alrededor del 25% de las personas entre 65 y 74 años tienen pérdida auditiva incapacitante. Esa cifra aumenta al 50% a los 75 años. Los adultos mayores frecuentemente experimentan pérdida de audición relacionada con la edad causada por cambios en el oído interno. Los exámenes de audición periódicos pueden rastrear esta disminución gradual de la audición que se produce con el envejecimiento, por lo que se pueden implementar adaptaciones y estrategias de escucha adecuadas. Programar pruebas de audición le permite abordar de manera proactiva los cambios auditivos relacionados con la edad.

Compruebe si hay otros problemas de salud

Las pruebas de audición no sólo identifican la pérdida auditiva. También detectan otros problemas médicos. Los problemas con los oídos, el nervio auditivo o el cerebro pueden contribuir a los cambios auditivos. Los resultados de las pruebas que no coinciden con el tipo de pérdida auditiva esperada con cambios simples relacionados con la edad pueden indicar condiciones de salud adicionales que requieren una evaluación adicional. En ocasiones, los exámenes de audición pueden revelar problemas subyacentes como tumores benignos, infecciones de oído o acumulación de líquidos.

Obtenga diagnósticos precisos

Existen diferentes tipos de pérdida auditiva con diferentes causas. La pérdida auditiva neurosensorial derivada de daños en el oído interno tiende a ser permanente. La pérdida auditiva conductiva causada por obstrucciones en el canal auditivo puede ser reversible. Sólo los exámenes auditivos completos realizados por audiólogos pueden diagnosticar con precisión la naturaleza y los orígenes de la discapacidad auditiva. Con diagnósticos precisos, se pueden elaborar planes de tratamiento adecuados y eficaces. Las pruebas precisas conducen a soluciones adaptadas a sus necesidades auditivas específicas.

Comunicar las necesidades a los seres queridos

Cuando sus seres queridos comprenden los desafíos de su pérdida auditiva, pueden ajustar su comunicación para ayudarlo. Sin embargo, necesitan aprender exactamente lo que usted puede y no puede oír bien para hacer esas adaptaciones. Realizarse una prueba de audición le proporciona documentación de sus capacidades auditivas que puede compartir con familiares y amigos. Esto les da una idea de cuál es la mejor manera de hacer oír su voz cuando hablan con usted.

Encuentre los audífonos adecuados

Los audífonos vienen en muchos estilos, formas, tamaños y capacidades. Para encontrar audífonos que se adapten a sus necesidades y preferencias personales, su audiólogo necesitará información detallada obtenida de exámenes auditivos exhaustivos. Las pruebas revelan el tipo y grado exacto de pérdida auditiva en diferentes frecuencias de sonido. Esto permite la programación de audífonos con la amplificación y las funciones adecuadas para su perfil auditivo único. Se requieren pruebas exhaustivas para encontrar los audífonos óptimos para usted.

Monitorear la exposición al ruido

La exposición excesiva al ruido conduce con el tiempo a una pérdida auditiva inducida por el ruido. Las pruebas de audición pueden detectar indicios tempranos de cambios debidos a ruidos fuertes. Esto le brinda la oportunidad de tomar medidas preventivas, como evitar entornos ruidosos, antes de que se produzcan daños permanentes. Para quienes se encuentran regularmente cerca de maquinaria ruidosa o ruido recreativo como conciertos, hacerse controles auditivos de rutina ayuda a monitorear los impactos del ruido en la audición.

Verifique la función del audífono

Para quienes ya usan audífonos, los exámenes de audición programados permiten a los audiólogos verificar que los dispositivos estén funcionando correctamente. Las pruebas identificarán cualquier problema con el ajuste, la configuración o la funcionalidad del audífono. Las revisiones de mantenimiento de los audífonos en las citas auditivas periódicas detectan los fallos de funcionamiento a tiempo, antes de que afecten gravemente al uso de los audífonos. Los exámenes también brindan oportunidades para ajustar la configuración de los audífonos con el tiempo para obtener el máximo beneficio.

Monitorear las infecciones del oído medio

La acumulación de líquido y las infecciones del oído medio pueden causar pérdida auditiva conductiva temporal en los niños. Si no se tratan, estas afecciones del oído medio afectan el desarrollo del lenguaje, el aprendizaje y más. Las pruebas de audición son una forma importante de controlar la función del oído medio, detectar infecciones y evaluar cualquier fluctuación auditiva. Para los niños propensos a tener problemas del oído medio, las revisiones periódicas de la audición garantizan que los problemas se traten con prontitud.

¿Por qué consultar a un audiólogo?

Los audiólogos cuentan con capacitación y equipos especializados para evaluar la capacidad auditiva de manera integral. Realizan una batería de pruebas en una cabina insonorizada para determinar el tipo, grado y configuración de la pérdida auditiva. Los audiólogos pueden diagnosticar la pérdida auditiva neurosensorial, conductiva o mixta y determinar si los dispositivos de amplificación, como los audífonos, son apropiados. Los médicos generales carecen de experiencia profunda, equipo calibrado y entorno insonorizado para evaluar exhaustivamente la audición. Si bien los médicos de cabecera pueden detectar déficits auditivos graves, los audiólogos brindan diagnósticos más matizados para que los pacientes reciban el tratamiento y el manejo adecuados. Ver a un audiólogo directamente proporciona atención médica auditiva eficiente y precisa.

Programar exámenes auditivos periódicos es una de las cosas más importantes que puede hacer por su salud auditiva a cualquier edad. Las pruebas permiten la detección temprana y el tratamiento de la pérdida auditiva. También monitorea los cambios auditivos relacionados con la edad y los inducidos por el ruido, revisa los audífonos, detecta otros problemas de salud y proporciona puntos de referencia para comparar a lo largo del tiempo. Para estar al tanto de su salud auditiva, hágase una prueba de audición ahora si ha pasado un tiempo. Sea diligente en seguir las recomendaciones de su audiólogo para futuras revisiones. Tomar estas medidas contribuirá en gran medida a preservar sus capacidades auditivas y comunicativas.