Cuando se habla de presión arterial, a veces se pasa por alto la cifra inferior, o presión arterial diastólica, en favor de la más conocida presión arterial sistólica. Sin embargo, es necesario abordar su importancia para la salud del corazón.
La presión arterial medida en el rango diastólico, o entre latidos del corazón, representa la presión dentro de las arterias al nivel más bajo posible de fuerza que se les aplica. La presión arterial diastólica elevada es un indicador silencioso de problemas de salud importantes, como enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
Afortunadamente, la presión arterial diastólica se puede reducir de forma natural mediante varios métodos, lo que mejora su salud cardiovascular general.
Aquí hay cinco formas prácticas de reducir naturalmente su presión arterial diastólica que puede implementar en su rutina diaria.
Comprender la presión arterial: sistólica y diastólica
Tu presión arterial siempre está registrada en dos dígitos, lo que debe haberte llamado la atención. La cifra superior, o presión arterial sistólica, representa la presión arterial en el corazón durante un latido cardíaco. Sin embargo, el número más bajo, conocido como presión arterial diastólica, muestra cuánta presión mantiene su corazón entre ondas.
Es vital recordar que, aunque la presión diastólica alta es perjudicial, también puede ser una señal de que el corazón no descansa lo suficiente entre latidos. Por lo tanto, mantener un equilibrio entre las dos demandas es crucial para una salud óptima.
Con frecuencia se considera que 120/80 mmHg es el rango ideal de presión arterial. La presión arterial generalmente se considera alta cuando la sistólica (primera lectura de presión arterial) es superior a 120-130 o la diastólica (segunda lectura de presión arterial) es de 80 mmHg o más.
Se realiza un diagnóstico de hipotensión o presión arterial baja si la medición es inferior a 90/60 mmHg. No tan importante como la presión sistólica, que se estudia con mayor frecuencia, es la presión diastólica, que indica la resistencia de los vasos sanguíneos al flujo sanguíneo mientras el corazón está en reposo.
Una presión arterial diastólica excesiva puede provocar varios problemas de salud además de forzar el corazón y aumentar las posibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares. Son necesarios cambios en el estilo de vida que mejoren la salud cardiovascular en general para reducir la presión arterial diastólica.
Aquí está cómo bajar la presión arterial diastólica mientras utiliza estrategias naturales y efectivas:
1. Reducir la ingesta de sodio
Uno de los cambios más rápidos que puede realizar en su dieta para reducir su presión arterial diastólica es reducir la cantidad de sodio que consume.
El sodio hará que el cuerpo retenga más agua de la que necesita, elevando la presión arterial alta, lo cual es terrible para el corazón.
Se recomienda mantener la ingesta diaria de sal por debajo de los 2.300 miligramos; sin embargo, si ya padece hipertensión, lo mejor es consumir incluso menos sodio.
Esto, por tanto, implica seleccionar alimentos con menor contenido en sodio, como alimentos frescos e integrales, en lugar de alimentos procesados. Asegúrese de tener cuidado con los culpables del alto contenido de sodio, como el pan, la pizza y la comida rápida.
2. Aumentar la actividad física
Otra forma muy eficaz de afrontar el aumento de la presión arterial es aumentar la actividad física. Participar activamente en ejercicios aeróbicos como caminar, trotar, andar en bicicleta, nadar o bailar hace que su corazón funcione mejor y disminuye la fuerza necesaria para bombear sangre por todo el cuerpo.
Además del ejercicio aeróbico, el entrenamiento de fuerza juega un papel importante en el control de la presión arterial.
El levantamiento de pesas o los ejercicios de peso corporal para reducir la grasa corporal, promover la masa muscular y mantener una circulación sanguínea saludable de los vasos sanguíneos pueden controlar en gran medida la presión arterial. Por tanto, tienen un efecto positivo en la salud general.
3. Mantenga una dieta saludable
Hacer ajustes en la dieta es una de las cosas más importantes que puede hacer para controlar su presión arterial. Aumentar la ingesta de alimentos ricos en potasio, como aguacates, patatas, espinacas y plátanos, puede ayudar al cuerpo a regular la retención de sal.
Asimismo, entre los alimentos ricos en calcio y magnesio, esenciales para controlar la presión arterial, se encuentran los lácteos, las almendras y las verduras de hojas verdes.
Además, es útil seguir el plan de dieta Enfoques dietéticos para detener la hipertensión (DASH). Consiste en comer una variedad de alimentos saludables con un menor consumo de grasas saturadas y colesterol para mantener una dieta saludable para el corazón.
4. Manejar el estrés
El manejo eficiente del estrés es fundamental porque permite mantener un nivel saludable de presión arterial.
El cuerpo libera hormonas en respuesta al estrés crónico, que toma la forma de una reacción de “lucha o huida”, lo que aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial de manera duradera.
Integrar la atención plena y la meditación en su vida diaria crea un espacio de tranquilidad donde se reducen las hormonas del estrés y la presión arterial baja.
Acompañado de la práctica de ejercicios reductores del estrés y de respiración y relajación muscular progresiva, se puede lograr la disminución de los niveles de estrés y una mejora de la salud cardiovascular.
Como paquete, representan un valioso conjunto de herramientas para el manejo del estrés y la estabilización de la presión arterial.
5. Opciones de estilo de vida
Para un control eficaz de la presión arterial, es imprescindible elegir un estilo de vida bien informado. Limitar el consumo de alcohol es uno de los puntos más importantes porque el alcohol puede provocar picos destructivos en la presión arterial.
Lo mismo ocurre con fumar; Cada cigarrillo que fumas provoca un aumento en tu presión arterial, que persiste durante varios minutos incluso después de haberlo terminado.
Al abandonar estos hábitos, las personas pueden esperar que su presión arterial normal se restablezca gradualmente con el tiempo.
Además, tener una buena calidad del sueño es esencial para mantener la presión arterial bajo control porque cualquier deficiencia en la calidad del sueño provoca una elevación de la presión arterial.
Trate de dormir una excelente noche de 7 a 8 horas para mantener su corazón sano y estable y sus niveles de presión arterial favorables.
Conclusión
El control de la presión arterial diastólica es una parte crucial para lograr un corazón sano y una buena salud en general.
Mediante la incorporación de un estilo de vida saludable se puede aliviar considerablemente la presión arterial diastólica.
Además, las prácticas mencionadas anteriormente no sólo le ayudarán a reducir su presión arterial diastólica alta, sino que también le ayudarán a mantener el estrés bajo control. A través de estas medidas activas para una vida saludable para el corazón, puede reducir los peligros para la salud cardiovascular y mejorar su calidad de vida en general.